domingo, 28 de junio de 2020

Convento de Amor


B
eatifiqué cancelando el fin de semana romántico en el convento de Segovia cuando volvieron a aparecer los fantasmas de tu pasado, rozando lo macabro, digno de frenopático. Tu actitud ignominiosa para conmigo tampoco ayudó, pues descubrí que pese al amor nada podías ofrecerme salvo tu belleza imperfecta, y tu intelecto ausente provocaba mis silencios, sabedora que tus chinchorrerías me alejaban más y más de ti. Cambié el romanticismo de ciudad monumental por una última noche en un lugar apartado, como hacen las madres manejando la economía familiar, sin que nadie se de cuenta. El resultado fue una exposición de arte zopenco por tus labios pronunciado, que sólo me reafirmó y que ignoré. Una vez relajado, olvidar la equivocación cometida contigo resultó sencillo: La ausencia de pensamiento de jodienda produce paz de espíritu y claridad mental, algo necesario para tomar decisiones vitales.

4 comentarios:

  1. Lo siento mucho. Ya sé que sólo es un poema en prosa y no necesariamente biografía pero a veces el dolor debe reposar en el silencio.

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    1. No hay dolor cuando uno dice basta Joaquín. Pero cuando algunas personas exigen sin ofrecer nada, hay que pregonar las verdades, resulta más educado que insultar.

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  2. Cierto, hay que ser muy valiente para darlo todo y aceptar que algo termina

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    1. El amor se demuestra en gestos, no en palabras. Si te dice que te quiere pero ni a almuerzo te invitan y farruca y exigente se pone, ni come ni comer deja, es mejor dejalla y que su padre la aguante.

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