Y naciste, para que Dios te prestara a nuestros cuidados y nos hicieras más felices. Anoche te hablaba en voz bajita, con esa conexión entre tu y yo que no sabría explicar con palabras. Te decía que desde que te vi supe que te querría un poquito más que a tu madre ¡Ay tu madre! Es un ser particular. La última persona que hubiera pensado que fuera la madre de mis hijos. Es coqueta y vivaz, con muchas ganas de vivir, tantas como para dar vida a otra persona, que eres tú. Sé que te querrá siempre, aunque no sé si será capaz de gestionar sus emociones cuando las cosas no salgan como ella quiere, esto es, cuando tus decisiones o tus acciones no sean las que espera: Entonces te amará aún más, porque sabe que suele ser la solución a casi todo. He de decirte que a mi me ha hecho mejor persona, y sé que convertirá tu mirada de inocencia en un hombre educado y cariñoso, porque así somos en esta familia, de dar abrazos hasta quitarnos el aliento, por si mañana no podemos darlos.
De momento no te suelta el dedo, dicen que es un instinto pero a saber
ResponderEliminarCreo que le caigo bien.
Eliminar